Los accidentes…en la mayoría de los casos son accidentes, tanto de tráfico como domésticos, son los más recurrentes en estos últimos años; y la necesidad de “alguna” protección hacia familiares u otros hace que contratemos un seguro de vida, como dicen por ahí “por si acaso...”
Los seguros de vida, un mundo dentro de un mundo lleno de finanzas, debido a que la cartera es muy amplia, principalmente de entidades financieras, asegurándote desde un todo (con restricciones) hasta los más mínimo posible restringiendo situaciones u otros.
¿Quienes deberían de asegurarse?
La pregunta es sencilla y fácil de razonar, la mayoría de las aseguradoras se enriquecen gracias a familias preocupadas por el futuro de sus hijos, hipotecas, o deudas que posteriormente podrían estar pendientes; por otro lado, las personas jóvenes o mejor dicho personas solteras, son las que menos las contratan por no poseer familia o vivir con sus padres, esto hace que se fomente un problema hacia estas empresas, debido a la gran población joven en el país y sin poder contratar uno de sus seguros…, pues la única solución que se han dado a esto es ofrecer un seguro mucho más barato con algunas “líneas trampa” por supuesto.
¿Qué consigo?
Depende mucho del tipo de seguro que contrates…
- En la mayoría de los casos, los beneficios son adquiridos a sus respectivos beneficiaros del seguro contratado cuando el asegurado fallece
- Sin embargo, existe varios tipos de seguro muy particulares, algunas de las características son:
- Remite cierto dinero, al asegurado, en un determinado tiempo sin que este hubiera fallecido.
- Otro seguro indica la complementación de la pensión del asegurado por parte dl asegurado.
¿A quién aseguro?
En estos días se puede asegurar cualquier cosa, pero como hablamos de seguros de vida vamos con ello:
- Se puede asegura a cualquier persona física o jurídica, dependiendo de contrato firmado
- En la mayoría de los caso se asegura a familiares, con clausulas que indican a que va dirigido el dinero recibido por parte del beneficiario.
Con esto, concluimos y os dejo una recomendación, que un seguro de vida es necesario de acuerdo a nuestras necesidades y que siempre leamos las letras pequeñas, que siempre hay una permanencia, impuestos y otros.